El hombre se hizo siempre
de todo material
de villas señoriales
o barrio marginal
toda época fue pieza
de un rompecabezas
para subir la cuesta
del gran reino animal
con una mano negra
y otra blanca mortal.
Mortales ingredientes armaron al mayor luz de terratenientes
y de revolución destreza de la esgrima sucesos como un preso
Amalia abandonada por la bala, la vergüenza, el amor.
O un fusilamiento un viejo cuento modelaron su adiós.
Va cabalgando
el mayor con su herida
y mientras más mortal
el tajo es más de vida
va cabalgando
sobre una palma escrita
y a la distancia
de cien años resucita.
Trota sobre la espuma seguido por un mar de negros en machete
y sin encadenar ordena a su corneta un toque de a degüello
y a un siglo de distancia entona nuestra canción y con recia garganta
canta, espanta lejos la maldición.