El tiempo arde sin dejar cenizas
El frío quema, quema... y ampara tu miedo
No dejes de correr, quieren... quieren tu Alma
Es tu conciencia, ¿no?
No, ¡Ya no tienes nada!
No! No hay perdón
Maldito hijo de dios perecerás
Pequeño ser mortal
En tinieblas renacerás
En eternos jardines de espanto y soledad
No! No hay piedad
Arrodillado siempre esTarán
Encadenados a su imperfecta realidad
Soy inmortal, soy inmortal
Tus hijos asi lo entenderán
Tus hijos asi lo entenderán