Mañana será 30 de Febrero
y tú vendrás a hacerme compañía
y ya te quedarás aquí conmigo
mi querido amigo arsénico.
Después de un corto viaje por la noche
descansaremos junto al abrigo
del sitio donde nace verde el trigo
mi querido amigo arsénico.
Corre, corre por favor
o no tendré valor
para morir amándola
voy al este del Edén
amigo mio ven, para esperarla allí,
mañana será 30 de Febrero
para mi.
Por una simple flor de invernadero
que no quiere creer lo que le digo
mi querido amigo arsénico,
y solo te diré que aún la quiero
que siempre estará aqui conmigo
y tú serás único testigo
mi querido amigo arsénico.
Corre, corre por favor
o no tendré valor
para morir amándola
voy al este del Edén
amigo mio ven, para esperarla allí,
mañana será 30 de Febrero
para mi.