En el centro de las cosas
Que fueron ignoradas
En la fuerza y el fracaso
Que jugo el sentido y la experiencia
En la cálida inmadurez
De una torpe alma joven
Creyendo en un mundo ignorado
Saltando en los charcos
De un sueño que no importa en realidad
Esperando un viento que mueva la verdad
De los que no se resignaron
Viajando en la galaxia imaginaria
Y en mi propia sangre
Ahí me encontraras