Me desespero, porque el boli no me ayuda a escribir lo que quiero,
el papel está en la luna vestido de cuero,
y esperando que otra vez vuelva a vivir.
Es un castigo, escribir una canción, a ver que digo,
que no estoy ni bien sin tí ni bien contigo,
que los sueños se me fueron ya a dormir.
Igual, exactamente igual, son todos los momentos.
Muy mal, lo vuelvo a hacer muy mal, prometo que lo siento.
Es como siempre, la tristeza ha llegao ya, yo le digo que entre,
que me venga a contagiar de su mala suerte,
yo me caigo y no me intento levantar.
Muerto de celos, la peor enfermedad, siendo sinceros,
una cura de humildad en un cenicero,
un remedio que nunca debe llegar.
Callar, cansado de callar, en el mejor instante.
Saltar, conseguiré saltar, y ponerme delante.
Hoy se alarga la madrugada,
Hoy mi cama parece helada,
Hoy los ojos no se me cierran y aun así no veo nada (BIS)
Son las semanas, sin ninguna novedad y con muy pocas ganas,
nada más que reventar y con un par de alas,
las que agobian mis ansias de caminar.
Codo con codo, primavera y tempestad luchando en el lodo,
una mezcla de maldad y de buenos modos,
un recuerdo que nunca quiero olvidar.
Sentir, volviendolo a sentir, ya todo es diferente.
Decir, y que quiero decir, que a mi nunca me mienten.
Hoy se alarga la madrugada,
Hoy mi cama parece helada,
Hoy los ojos no se me cierran y aun asi no veo nada