Deja que en tus manos la flor se marchite
Disfruta de su hermosura mientras existe
No intentes detener ni la risa ni el llanto
Es mejor sentir que te la viviste
Que se haga ceniza y se la lleve el viento
Si total nada es eterno
Es mejor la flor que se marchita en tu mano
Que flor seca entre hojas de tu cuaderno.
Atrapo el tiempo como una flor en un cuaderno
Todo se detiene y se hace eterno
Las agujas del reloj quedan quietas y obedientes
Bajo el conjuro de no volver a verte
Pasan los años, pasan los días
Se cansan las horas en cadenas infinitas
Y los colores y los perfumes
Y hasta las facciones se olvidan
Y ya ningún recuerdo tiene vida
Porque transforme en cárcel a este cuaderno
Para conservarte día a día.
Deja que en tus manos la flor se marchite
Disfruta de su hermosura mientras existe
No intentes detener ni la risa ni el llanto
Es mejor sentir que te la viviste
Que se haga ceniza y se la lleve el viento
Si total nada es eterno
Es mejor la flor que se marchita en tu mano
Que flor seca entre hojas de tu cuaderno.
Entonces un día de manera casual
Impertinente al pasar las hojas te me apareces
Y se rompe el castigo de lo eterno
Y regresas como viajante del albergo a visitarme
Entre sombras y a castigar a quien te ha herido
Con el peor de los castigos: El del olvido
Porque no atrape nada entre esas hojas
Queriendo engañar a la naturaleza como se me antoja
Con la falsa certeza de que no pasa nada
El árbol vivirlo enterrarlo hacerlo olvido
Y acá no pasó nada
Ohuo…
Acá no pasó nada
Ohuo…
Y aquí estoy con la falsa certeza de que no pasa nada
El árbol vivirlo enterrarlo hacerlo olvido y acá no pasó nada.
Deja que en tus manos la flor se marchite
Disfruta de su hermosura mientras existe
No intentes detener ni la risa ni el llanto
Es mejor sentir que te la viviste
Que se haga ceniza y se la lleve el viento
Si total nada es eterno
Es mejor la flor que se marchita en tu mano
Que flor seca entre hojas de tu cuaderno.
No cometí el error de agotarte
De vivirte entera de deshojarte
De hacerte mía, de caminar todos los caminos
De beber de todas las fuentes en sequía
No me equivoque de ser desmedido
De ser generoso, imprudente y ansioso
Irrefrenable, desbocado de tu perfume intoxicado
Mantenerte a mi lado pa' no reprocharte algún día de mi cobardía
Pues pedía sin tenerte pa' que fueras solo mía.
Y te tengo aun pero estas en pausa
Ahora la flor es inmortal por mi causa
No respeta ni el color ni el aroma
Se ha convertido en falsa
Tan solo queda de aquella belleza
La silueta tiesa de lo que ha sido
Y me castiga y me recrimina
Condenarla a no cumplir su destino
Me enceguece como el sol a un albino
No puedo parar de desearla
Me controla los cinco sentidos
Ay, ya no quiero mirarla.
Deja que en tus manos la flor se marchite
Disfruta de su hermosura mientras existe
No intentes detener ni la risa ni el llanto
Es mejor sentir que te la viviste
Que se haga ceniza y se la lleve el viento
Si total nada es eterno
Es mejor la flor que se marchita en tu mano
A que quede atrapada en un libro de recuerdos.