Del polvo fuimos hechos
y en polvo terminaremos,
derramó toda su sangre
por todas nuestras falsedades.
A fariseos y escribas
les mostró sus hipocresías,
todos lo señalaban
porque la verdad predicaba.
Vilmente fue traicionado,
entregado y crucificado,
mas nunca se ha vengado
pues siempre nos ha perdonado.
Hoy tenemos que buscarlo,
el mundo se cae a pedazos,
pronto El regresará
para el Juicio Final.