Muerdo el aire en que estuvo tu boca
El vacío devuelve el aliento zumbón
De los muebles que miran, piadosos, distantes
El abrazo asfixiantes del rechazo sin más
Esta otra piel que arde sin sol que la toque
Esperé de vos y de mi ser una
Contra todo consejo y augurio del final
Que la vida y la muerte nos tejiera con hilos
De transparente, indisoluble unidad
Unicas. Una. Ambas
¿ Te dije o imaginé decirte
Abrime, horadame, graba tu nombre
En el revés de la piel?
¿ Te dije o soñé decirte
Se mi hormiga particular
Mi obsesivo insecto
Mi fruta firme
Mi ácida manzanita?
No estas, no estas
Dos que cruzan la calle para no
Saludar.