El viento frío de norte
alumbra mis despertares,
aunque no encuentre mi lugar.
Perdido en mil horizontes,
sumando triunfos y errores,
termino y vuelvo a empezar.
Noches que se hacen días,
caricias que he cambiado por melodías
y gritan tu nombre.
Dulce melancolía,
es el sabor amargo de mi alegría,
la vida que quiero es la que elegí.
Amo sin decir te quiero
por mis miedos,
nunca aprenderé a vivir sin tí.
Amo y muero sin remedio
aunque lo intento,
no es mi culpa haber nacido así.
El viento frío de norte
abrigará mi corazón,
mi débil corazón.
Un hombre nunca se esconde
si ha sido fiel a su alma,
un hombre pide perdón.
Noches que se hacen días,
caricias que he cambiado por melodías
y gritan tu nombre,
siempre gritan tu nombre.
Dulce melancolía,
es el sabor amargo de mi alegría,
si curas mi herida, seré tu aprendiz.
Amo sin decir te quiero
por mis miedos,
nunca aprenderé a vivir sin tí.
Amo y muero sin remedio
aunque lo intento,
no es mi culpa haber nacido así.
Si volviera a nacer
seria para amarte otra vez,
aquí,
en el umbral de tus sentidos.
Si volviera a nacer
seria para huir junto a tí,
los dos,
camino de un sólo destino.
Amo sin decir te quiero
por mis miedos,
nunca aprenderé a vivir sin tí.
Amo y muero sin remedio
aunque lo intento,
no es mi culpa haber nacido así,
así.
Haber nacido así.