Por primera vez, por primera vez
me he sentío hombre sin saber por qué,
seguramente tú tengas la culpa por ser tan mujer.
Yo vengo a darte los recuerdos de un hombre que conocí,
vive, vive pero siempre vive acordándose de ti.
Me lo encontré en el camino y nos hicimos hermanos,
le invité a que subiera al lomo de mi caballo
y en una venta, tomando vino y más vino
a mi hermano de camino le escuché dos o tres letras:
"mi novia se llama Estrella y tiene un firmamento solito pa ella".
Solo te besé una vez
y cuando pienso en tu beso mi boca me sabe a miel.
Anoche soñé contigo,
fue como un cuento de hadas,
yo era el príncipe del cuento
y tú la reina encantada.
Yo te besaba tu boca
y tú mi pelo acariciabas
y las estrellas del cielo de felicidad lloraban,
cuando yo me desperté y vi que tú me faltabas
quise quedarme dormío pero el sol no me dejaba.
Por la madrugá,
por la madrugá
tu pecho de seda es pa mí ná más.
Y tú me besas la boca
y tú me muerdes los labios
y me ruegas y me lloras
y tu vida es un agrabio
¿y qué culpa tengo yo si yo no puedo remediarlo?
que te quiera es imposible porque yo en mi corazón no mando.