Hermanos de cielo, igual de huérfanos,
separados por un mar de lágrimas.
Dicen que tanto llanto formó un río
que dividió al gran continente en dos.
El río del dolor ... Gondwana.
El río del dolor ... Gondwana.
El río del dolor ... Gondwana.
Gondwana, Gondwana, Gondwana,
Gondwana, Gondwana.
El mono quedó solo en la pradera,
se para para ver el horizonte,
descubre el fuego y va perdiendo el pelo,
de a poco se va convirtiendo en hombre.
Ahí se acabó. Empezó el final.
Heredamos el destino de Gondwana,
pedazos nuestros se van para algún lugar.
Desafiando al futuro nuestros ausentes
preparan el regreso en carros de cristal.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van, se van, se van, se van.
Gondwana, Gondwana,
Gondwana, Gondwana.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.
Vienen y se van.