Comenzó a vivir en la locura
Que sus escasos recursos
Le brindaba; por no tener
La dicha, que nace en la casualidad
De la bendita suerte
No era lo malo; pero requería el sacrificio
Del amor que no se elije
Soportar algún dedo que escarbara en la
Herida. Y comenzó la locura
Curiosa y obligada pero de un propio juicio
Y una propia decisión
Porque en si, siempre somos responsables
De tal loca locura; y tal locura loca