Te recuerdo todavía
con la cara desvelada,
la ternura y la sonrisa,
y el verano en tus espaldas.
Era casi de mañana,
y dijiste "hasta luego"...
Te marchaste lentamente,
convirtiéndote en recuerdo.
Mis manos no pueden olvidarte,
mis ojos extrañan tu mirada.
Y tu piel de azúcar en mis labios
se vuelve salada.
Es inevitable la nostalgia,
me vuelven los días a tu lado
y no me resigno a perderte
de brazos cruzados.
Tu recuerdo todavía
me retumba últimamente,
y pensar en tu regreso
me resulta insuficiente.
Para mí nada es eterno,
y no pienso estar contigo,
solamente con callarme
y pensar que aún sigo vivo.
Mis manos no pueden olvidarte,
mis ojos extrañan tu mirada.
Tu piel de azúcar en mis labios
se vuelve salada.
Es inevitable la nostalgia,
me vuelven los días a tu lado
y no me resigno a perderte
de brazos cruzados.
Mis manos no pueden olvidarte,
mis ojos extrañan tu mirada.
Tu piel de azúcar en mis labios
se vuelve salada.
Es inevitable la nostalgia,
me vuelven los días a tu lado
y no me resigno a perderte
de brazos cruzados.