Vos estabas, esperando al marroquÃ
En barajas, el colmo del sÃndrome estocolmo
Como aquella temporada cultural
Con rehenes, atados al piano rojo
Vayamos pintados con sangre de los dos
Siempre, siempre
Nos esperan con balas de plata dulce
Fundidas de arreglos dentales nuestros
Un hombre es un campo de batalla
Si no se calla es una revolución de claveles
Vayamos pintados con sangre de los dos
Siempre, siempre
Entonces era la libertad
A veces matarÃa por cinco minutos más
Entonces era la libertad
Ahora me toca huir a mÃ, nene
Vayamos pintados con sangre de los dos
Siempre, siempre
Siempre