Hoy amanece llorando mi alma
no hay consuelo al amanecer.
Sigue gritando por dentro
mi corazón no lo puede comprender.
Un universo de amor y cariño,
un mundo nuevo por construir.
Fue tu mirada y sonrisa, mi calma,
cuando llovía en mi.
El sentimiento en silencio
un recuerdo provocara en mí ese temor.
El trasladarme hacia tras en un tiempo
en que reinaba sólo tu amor.
Y añoro tus manos, tu pelo, tus labios,
aromas, fragancias, tu respirar,
Sentirte mi lado, tu piel en mis manos,
cosas que no puedo olvidar.
Fue el tiempo: verdugo implacable y mortal
Fue el tiempo: que pasa sin más
Fue el tiempo: luchamos por sobrevivir
Fue el tiempo: en ti y en mí.
Guardo con llaves de fuego
momentos imposibles de describir.
Cabalgaré con cuidado en el tiempo
que me quedará por vivir.
Sin tus abrazos que guíen mis pasos,
sólo mi fuerza, para continuar.
Hoy no estoy solo y ya noto esas manos
que me ayudan a levantar