Fuimos a la tierra donde enviaste peregrinos
a predicar la verdad
Donde mataron a mis hermanos
y se rieron orgullosos
No quedará nadie vivo
Ahogaremos sus risas en el mar
No habrá perdón para los infieles
Guía mis manos contra los herejes
Que desataron tu furia
Regaremos la tierra con sangre en este sacrificio
Hoy no habrá palabras, sólo sufrimiento
Arderá está ciudad maldita (nadie la nombrará jamás)
Fuimos a la tierra donde enviaste peregrinos
a predicar tu verdad
Un suelo indigno para el descanso de tus hijos
No habrá perdón para los infieles
Ahogaremos sus risas en el mar
Sangre en mis manos como sacrificio
Ahogaremos sus gritos en el mar
Ahogaremos sus risas en el mar
Ahogaremos sus gritos en el mar.
Regaremos la tierra con sangre
Honraremos sus almas
Regaremos la tierra con sangre
Honraremos sus almas.