Aquella mancha libre sobre el cielo,
aquellas nebulosas como hielos
son la pura apariencia del desvelo,
del sueño que despierta en nueva mano,
altura que se sube hacia lo humano
donde la estrella sabe que ese signo
es el sombrero en alto de Sandino.
Debajo del sombrero están dos alas
por un pueblo de pájaros guardadas.
Si hay riesgo da el zanate campanadas
llamando amaneceres que nos tienten.
No sabe el corazón que de repente
no es él, todo cambió, nada es lo mismo.
Es el sombrero en alto de Sandino.
El amador se me rugama de ternura,
masaya como un león y se apresura,
se guatemala todo y se me hondura
y sube a una escalera tan laviana
que el sol todo asombrado lo reclama,
le dice "corazón, vení, vení, vení conmigo".
Es el sombrero en alto de Sandino.
Todo parece casi seco en el planeta, en esta fragua,
y sin embargo mana agua, mana agua, mana agua en Nicaragua.
La vergüenza se quita las enaguas
y se desnuda toda, toda, toda, toda revelada.
Diriamba que anda enamorada
de ese volcán humano, tierno como un niño.
Es el sombrero en alto de Sandino.
Es nuestroamericano el compañero,
es nuestra la cabeza y la idea y el sombrero,
son nuestras las fronteras, los aceros
con que hemos de cortar tantos entuertos,
decirle más verdades a lo cierto,
decirle más y más y más verdades a lo cierto,
que el amador se nos rugama de tan vivo.
Es el sombrero en alto de Sandino.